Crédito: Agencia UNO
El polémico viaje generó un convulsionado concejo municipal de Maipú esta semana. Una instancia encabezada por la alcaldesa Cathy Barriga, quien se vio en muchos momentos cuestionada, específicamente por los concejales Abraham Donoso y Marcela Silva.
Parece que les quedó gustando la experiencia, porque el concejo municipal de Maipú aprobó el tercer viaje consecutivo al Hotel Pucón, bajo el concepto de «capacitación» a sus funcionarios.
El denominado «Servicio de Producción y Capacitación, Integración y Trabajo en Equipo», según el municipio, busca «potenciar las capacidades de los funcionarios con más de cinco años de servicio en diversos ámbitos como liderazgo, comunicación, trabajo en equipo y bienestar».
Se invitó a participar a través de mercado público a tres proveedores, de los cuales solo Torres Castro Servicios Integrales, la misma empresa que organizó la actividad en el 2018, respondió a la cotización con un monto que bordea los 48 millones de pesos.
Antes del inicio de la votación, la alcaldesa Cathy Barriga sostuvo que gracias a una «caprichosa abstención», el viaje tendrá un mayor gasto en pasajes y hospedaje. «Nosotros tenemos la responsabilidad de proteger las arcas municipales. Hoy solamente el pasaje sale medio millón de pesos más, entonces hay que también pensar en eso cuando uno toma decisiones de abstención cuando se trata de optimizar los recursos», dijo la jefa comunal.
Barriga defendió férreamente el cuestionado viaje del 2018, pese a que desde la interna del gobierno local lo calificaron como una «actividad disfrazada de capacitación» y que significó el gasto de 46 millones de pesos, como relató hace unos meses El Mostrador.
«Estos funcionarios vivieron el año pasado una experiencia que fue enriquecedora, que fue gratificante, que fue motivadora, sobre todo en el área social en que trabajamos (…). Todo recurso invertido en nuestra comunidad, en nuestros funcionarios que son los que prestan estos servicios, para mí, no son dineros que se deban cuestionar, ajustado completamente a derecho», agregó.
La reunión del concejo fue tensa, con encontrones entre la propia Barriga y los concejales Abraham Donoso y Marcela Silva, quienes pusieron en duda la pertinencia de la actividad.
Donoso enfatizó la desigualdad que existe por los funcionarios que no pueden acceder al viaje por no cumplir la cantidad de años de servicio requerida. «Los beneficiados son 100, no son los 600 funcionarios de planta. Cada cinco años un funcionario va a poder tener acceso a esto y de cinco años a diez pueden pasar dos gestiones, por lo que a lo mejor no va a permanecer en el tiempo este beneficio», sostuvo.
La concejala Silva, en tanto, le consultó a Barriga sobre el financiamiento del pasaje de su hijo menor y su cuidadora en la «capacitación»del 2018, a lo cual la alcaldesa respondió que «le pido que se lave la boca antes de hablar de mi hijo, todo gasto de mi hijo es financiado por esta alcaldesa».
«Es de público conocimiento de nuestros vecinos que yo trabajo con mi hijo, parte de mi oficina la tengo apta para él y me afecta, soy mamá», aseveró entre lágrimas la alcaldesa al referirse al hecho de que su hijo sea tema en discusión.
A pesar de las diversas críticas sobre el viaje, el concejo aprobó la actividad. La misma Cathy Barriga y los concejales Horacio Saavedra, Alejandro Almendares, Herman Silva, Pedro Delgadillo, Ariel Ramos, Erto Pantoja, Karen Garrido y Marcela Silva dieron el vamos al nuevo viaje.
«Yo voy a aprobar porque lo merecen. El funcionario municipal más que nunca tiene un sentido social en nuestra comuna», concluyó la alcaldesa.
El único en votar en contra fue Abraham Donoso, quien tomó la decisión en consideración a los 600 funcionarios que no cumplen los requisitos para asistir a la actividad.
El exdirigente municipal de la comuna, Freddy Campusano, quien será galardonado por cumplir 25 años de servicios como funcionario, expresó su profundo malestar por la reciente decisión del concejo municipal. «Vergüenza siento en mi condición de funcionario público, encuentro impresentable este gasto superfluo y millonario para un viaje de placer», publicó en su cuenta de Facebook.
«El déficit ético que enfrentan los organismos públicos en general, está muy relacionado con una cierta desconexión con los objetivos centrales que la ciudadanía espera de nosotros», agregó.
Lamentó que los dirigentes gremiales «limosnearan un viaje». «Quizás sea antipopular para mis colegas premiados, pero si estamos pidiendo cambios profundos en la sociedad y las instituciones del Estado, debemos partir con el ejemplo», concluyó.
