Claudio Villegas Oliva es el analista que tiene la misión de encontrar en el espacio digital aquellos conceptos que dan cuenta del estado de ánimo y el clima de opinión que impera mayoritariamente en los distintos segmentos de la ciudadanía. Académico de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano e investigador del Social Listening Lab UC, Villegas destacó por la buena labor como analista de datos masivos en el marco de la campaña presidencial que llevó a Gabriel Boric a la Presidencia. Experto en “modelamiento computacional” y sistematización de datos a través de metodologías cuantitativas y cualitativas, se encuentra entregando al actual Gobierno su experiencia en el área de la asesoría estratégica en materia de conflicto y fragmentación social.
Sabido es que en el nuevo Gobierno se mira con mucha atención lo que sucede en el ámbito digital, tanto o más incluso que en la anterior administración de Sebastián Piñera, quien confiaba tanto en el análisis de datos como en las encuestas para orientar política y comunicacionalmente su labor al mando del país.
Y precisamente por esto es que, ante la creciente necesidad de obtener pistas sobre el verdadero clima de opinión en la ciudadanía, la administración del Presidente Gabriel Boric reclutó a Claudio Villegas Oliva como jefe del Departamento de Estudios de la Secretaría de Comunicaciones (Secom). Como reputado profesional del área, los insumos de Villegas suben rápidamente al “segundo piso”, encabezado por Lucía Dammert, a efectos de lograr una mejor aproximación a ciertos fenómenos de interés del Gobierno. La diferencia entre una y otra administración gubernamental es que la actual fichó a un experto en la materia para que se dedique in situ y de manera exclusiva a tan importante tarea.
Hasta ahora Villegas, de profesión antropólogo, realiza una labor sigilosa en una de las unidades clave de La Moneda. Joven y de tupida barba, discreto, creativo y metódico, según sus cercanos, dueño de un estilo propio de un docente universitario y cultor del trabajo colaborativo, Villegas cuenta con las herramientas tendientes a proporcionar insumos para el Comité Político, a efectos de realizar un análisis pormenorizado de aquellos temas que concitan el interés del público. El cambio en el tono que ha experimentado el Gobierno en materia de seguridad pública se sustenta, sin lugar a dudas, en la información que ha emanado de los análisis de Claudio Villegas.
Experto en “modelamiento computacional” y sistematización de datos a través de metodologías cuantitativas y cualitativas, Villegas se encuentra entregando al actual Gobierno su experiencia en el área de la asesoría estratégica en materia de conflicto y fragmentación social, donde el país exhibe indicadores ciertamente preocupantes y que comportan un importante potencial de desestabilización. Por cierto: no es primera vez que trabaja para la coalición gobernante, toda vez que fue Villegas quien asumió la jefatura y coordinación del análisis estratégico de datos en el marco de la campaña presidencial. Su trabajo de análisis de audiencias permitió depurar discursivamente los mensajes de manera segmentada y diseñar una puesta en escena atendiendo a las especificidades de los distintos perfiles de votantes.
Tan determinante fue su aporte en la exitosa promoción de la candidatura del actual Presidente, que el círculo cercano del Mandatario no dudó en ficharlo para el desafío más difícil: gobernar. Hoy se encuentra trabajando con denuedo para encontrar esos insights o descubrimientos que surgen de la conversación política en redes, una que tiende a verse perturbada con información falsa y alteraciones algorítmicas por parte de perfiles falsos.
Para sumarse a este desafío es que Villegas debió suspender las cátedras en la Escuela de Antropología de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, así como su trabajo en calidad de investigador del Social Listening Lab UC, donde se especializó en el procesamiento de datos de sistemas de interacción social online. Fue además integrante del grupo Kaleido Consultores, empresa que ha prestado servicios a múltiples entidades públicas y empresas tanto chilenas como trasnacionales, del mismo modo que a importantes organismos multilaterales y organizaciones de la sociedad civil.
“Los métodos clásicos de registro de opinión pública siguen siendo tan eficaces como siempre. El problema es el objeto que se mueve a mayor velocidad y, por tanto, la encuesta de hace dos semanas puede tener poco que decir respecto a la actualidad. Es como pretender registrar una carrera de Fórmula 1 con una cámara fotográfica”, señaló Villegas en una entrevista publicada por el sitio de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano.
Consciente de la inestabilidad y velocidad con que cambian los “vientos” de la política en esta era digital, el antropólogo y asesor del “segundo piso” de La Moneda sostiene que “hoy el conflicto se propaga por al menos cinco canales: contacto físico, telefónico, WhatsApp y al menos dos RRSS públicas, ya sean combinaciones como Instagram y Twitter, o Instagram y TikTok, o Facebook e Instagram, y así. Los canales digitales tienen una dedicación de alrededor de seis horas diarias y eso amplifica todo. Lo mismo vale para cualquier tipo de información que tú puedas emitir individualmente. Y la información, cuando es eficaz, cambia la conducta de quien la recibe”.
