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Propuesta de Nueva Constitución
Convención Constitucional continúa este jueves con los discursos de apertura: reiteraron llamados al diálogo NUEVA CONSTITUCIÓN Crédito: Twitter @convencioncl

Convención Constitucional continúa este jueves con los discursos de apertura: reiteraron llamados al diálogo

Un total de 39 convencionales continuó este jueves con los discursos de apertura. Entre ellos, Patricio Fernández, del Colectivo Socialista, quien señaló que está de acuerdo con estos llamados a diálogo: «llegó el momento de hacerlo con todas y todos. Ya no se trata simplemente de sustituir las reglas de la dictadura. Conviene recordar quienes somos. Una pluralidad de personas con diferentes orígenes, trayectorias de vida e intereses, que nos hemos reunido aquí para proponer un pacto cumpliendo las reglas elementales de la democracia». Llegó el tiempo de dejar atrás el Chile de los vencedores y vencidos, el Chile de la Constitución del 80, esa que sin una opinión contraria, sin participación de nadie, esa pétrea, que en su esencia no pudimos cambiar, que transformó al Parlamento en mayorías y minorías que no hacían cambios estructurales. Debemos dejar atrás el pasado, pero no para olvidarlo», dijo en tanto Felipe Harboe, del Colectivo del Apruebo.


39 convencionales continuaron este jueves los discursos de apertura en la Convención Constitucional. Al igual que lo ocurrido este pasado miércoles, la tónica estuvo marcada por los constantes llamados a «diálogo».

La primera en hablar fue Constanza Schonhaut, del Frente Amplio, quien afirmó que «nuestro tránsito aquí no será fácil, cumplir con el mandato que los pueblos nos encomendaron no será fácil. Pero Chile se merece un triunfo después de tanto sufrimiento. Y si bien tengo la convicción en estas salas están las mayorías para construir esos cambios, ese triunfo no está garantizado y dependerá en buena medida en que todas y todos seamos capaces de bajar los prejuicios, de tejer las confianzas, de despegarnos de los egos y también de nuestros discursos».

Posteriormente fue el turno del primer convencional de Vamos por Chile que habló en esta jornada, Álvaro Jofré: «Desde que comenzamos a funcionar con todas las innegables dificultades vividas, hemos vivido tiempos difíciles. Mientras el país enfrenta una situación preocupante, donde la polarización ha llegado a límites que hace mucho tiempo no se veían, en medio de un panorama de inestabilidad política, social y económica (…) Vivimos en un Chile que está experimentando cambios profundos, donde esta Convención tiene en sus manos avanzar en la tarea encomendada por al ciudadanía hacia un país más justo, más integrado, donde el respeto debe primar siempre, sin reparo».

Raúl Celis, también de Vamos por Chile, suscribió lo dicho por Jofré: «Si queremos una casa de algunos la tarea será mucho más sencilla. Bastará con que las mayorías transitorias aplasten a las minorías. El problema de aplicar esta tesis está a la vista, dado que cuando esa correlación de fuerzas cambie se modificará o se dejará sin efecto lo previamente impuesto. Ese no es el camino que Chile merece».

Patricio Fernández, del Colectivo Socialista señaló está de acuerdo con estos llamados a diálogo: «llegó el momento de hacerlo con todas y todos. Ya no se trata simplemente de sustituir las reglas de la dictadura. Conviene recordar quienes somos. Una pluralidad de personas con diferentes orígenes, trayectorias de vida e intereses, que nos hemos reunido aquí para proponer un pacto cumpliendo las reglas elementales de la democracia, la libertad para expresar las opiniones que defendemos, un trato respetuoso sin jerarquía de ningún tipo y la apertura para entender que el resultado final será distinto de lo que cada uno de nosotros en su fuero interno espera».

Margarita Letelier, de Vamos por Chile hizo un «llamado a todos los convencionales para que enmendemos el rumbo que hemos tomado, para que prime el diálogo, la comprensión y la razón. Dejemos de escucharnos los unos a los otros con la única finalidad de respondernos y comencemos a escucharnos los unos a los otros con la finalidad de comprendernos. Solo así podremos construir una casa donde verdaderamente quepamos todos».

Otro de los que habló esta jornada fue Renato Garín, de la Lista del Apruebo: «Después de las tinieblas, la luz. Después del Siglo XX, el Siglo XXI. Después del cinismo, la esperanza. Después del caos, la República. Después de Pinochet, la Convención Constitucional libre y soberana».

Tiare Aguilera, de Pueblos Originarios: «Ustedes ven aquí a una sola persona, a una mujer rapanui, pero represento siglos de una historia compartida, de una cultura viva, que se esparce como el viento a las semillas, como un susurro en medio del azul profundo y que hoy clama nuevamente reconocimiento, respeto y autonomía. Me educaron y prepararon para este momento, quizás nuestro último acto de confianza hacia el Estado de Chile».

Tras una pausa sanitaria, habló Hernán Larraín Matte, de Vamos pro Chile: «Quiero invitarlos a construir una Constitución donde todas las visiones de sociedad puedan aspirar a ser mayoría y gobernar. Una que nos permita vivir juntos desde nuestras diferencias. No una Constitución de revancha, no cometamos el mismo pecado de la Convención que estamos dejando atrás. Porque la principal amenaza de esta Convención s que algunos busquen imponer su proyecto ideológico y su programa de gobierno en el nuevo texto abriendo de esta manera una división que nos acompañará por décadas».

Malucha Pinto, del Colectivo Socialista vino después: «Este mundo se nos cae a pedazos porque no da respuesta al clamor humano ni a los desafíos del futuro presente en su tota complejidad, la sobrevivencia. Los árboles conversan en la profundidades de la tierra, los pájaros cantan la memoria de todo lo que somos, hemos sido y seremos, pero ya no escuchamos. Hemos perdido la conexión» .

Luciano Silva, de Vamos por Chile recordó los hechos de violencia del pasado lunes: «Solo el marxismo y sus derivados filosóficos creen que el fin justifica los medios. Por eso la violencia del 18/O no pudo ser superada. Hoy no solo hay rabia de los sectores pobres y excluidos, sumamos ahora mucha gente a través del país que perdió sus sencillos negocios, pero sobre todo su tranquilidad, libertad y alegría (…) Por eso no daba ni dará para celebración, ya es cuestionable si la violencia es necesaria para transformaciones sociales. Pero que la violencia se convierta en una constante de celebraciones y el único medio de expresión político, entonces simplemente es que hemos abierto las puertas al infierno».

Felipe Harboe, Colectivo del Apruebo: «Con sus sombras y luces, no es ética ni históricamente aceptable comparar la dictadura militar, llena de horrores, con una democracia con aciertos y errores. Llegó el tiempo de dejar atrás el Chile de los vencedores y vencidos, el Chile de la Constitución del 80, esa que sin una opinión contraria, sin participación de nadie, esa pétrea, que en su esencia no pudimos cambiar, que transformó al Parlamento en mayorías y minorías que no hacían cambios estructurales. Debemos dejar atrás el pasado, pero no para olvidarlo».

Paola Grandón, la conocida como «Tía Pikachu» (Apruebo Dignidad): «La nueva Constitución debe optar por el Estado social y democrático de derecho, que garantice los mínimos vitales a todos los habitantes del país. Estos mínimos vitales se traducen en prestaciones que el Estado proporcione de forma obligatoria a la población. Hablo de derechos sociales exigibles, incluso ante los tribunales de justicia».

El encargado de cerrar la jornada fue Bastián Labbé, de Movimientos Sociales: «Queremos una democracia radical que nos permita decidir sobre nuestras vidas en todos nuestros territorios. Queremos que la soberanía popular y comunal sea un principio que oriente la distribución del poder político, administrativo y económico».

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