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Créditos: BBC News
El viernes 22 de marzo, la princesa de Gales, Kate Middleton, anunció mediante los canales oficiales de la corona que se encuentra en tratamiento de quimioterapia preventiva, luego de que se descubriera que tiene cáncer tras someterse a una cirugía abdominal en enero.
El viernes 22 de marzo, la princesa de Gales, Kate Middleton, anunció mediante los canales oficiales de la corona que se encuentra en tratamiento de quimioterapia preventiva, luego de que se descubriera que tiene cáncer tras someterse a una cirugía abdominal en enero.
Surgen dudas sobre en qué consiste la quimioterapia preventiva. Según The Guardian, este tratamiento también se conoce como quimioterapia adyuvante, y es un régimen que consta de medicamentos contra el cáncer que se administra para eliminar las células cancerosas que permanecen en el cuerpo tras el tratamiento primario de esta enfermedad, que generalmente implica la extirpación mediante cirugía de un tumor.
El objetivo de esta terapia es reducir el riesgo de que el cáncer original regrese y se expanda. Esta situación generalmente ocurre después del tratamiento primario, ya que hay células cancerígenas que, debido a su tamaño, son indetectables.
Si el cáncer se detecta en una etapa temprana, hay menos posibilidades de que regrese en comparación con uno que se descubre en una etapa avanzada.
No hay una duración precisa para los regímenes de quimioterapia adyuvante, ya que los medicamentos administrados atacan células que se dividen rápidamente. Generalmente, dura entre tres y seis meses, pero esto depende del tipo y la etapa del cáncer, así como de lo extirpado en la primera etapa.
Según los estudios, este tratamiento es muy efectivo en cáncer de mama, colon y pulmón, aunque también se recomienda para otras formas de la enfermedad.
Sin embargo, son los médicos quienes llevan a cabo el tratamiento y deciden su éxito.
Los efectos secundarios de la quimioterapia dependen de los medicamentos específicos administrados, aunque los más comunes son: fatiga, náuseas, vómitos, diarrea, un mayor riesgo de contraer infecciones y pérdida de apetito.
Estos efectos surgen porque los medicamentos no solo atacan las células cancerosas, sino también todas las células que se dividen rápidamente, como el cabello, la médula ósea, la piel y el revestimiento del sistema digestivo.
El daño a los tejidos sanos suele ser temporal y desaparece una vez finalizado el tratamiento.
Los estudios muestran que las personas jóvenes suelen tolerar mejor este tratamiento en comparación con los pacientes mayores, y experimentan menos efectos secundarios debido a sus “mayores reservas funcionales”.
Por lo tanto, a las personas jóvenes se les pueden administrar dosis más altas de medicamentos debido a la probabilidad de eliminar las células cancerosas.
