El debate del lunes pasado tenía el ingrediente picante de que sería la primera aparición de Bachelet “debatiendo”. Sin embargo, las expectativas no se cumplieron, en una instancia que se convirtió en un punto de prensa colectivo, donde se le hizo el quite a la confrontación y el resultado político es casi igual a cero.
Lo que quedó de manifiesto es que la sociedad avanza a una velocidad, detrás de ella los medios de comunicación, y muy por detrás, los políticos, que reaccionan tarde a los cambios.
Desde el gobierno, por su parte, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, plantea que la asamblea constituyente y las propuestas de la Concertación espantan la inversión extranjera, usando esa amenaza económica para favorecer a la derecha en las próximas elecciones.
Y recién comienza a surgir la polémica del sistema de AFP`s, ya que estas se sienten perjudicadas por grupos como Felices y Forrados, que les quitan la posibilidad de invertir la plata de los cotizantes de manera más riesgosa, lo que pone en jaque todo el sistema.
