BRAGA
Ante la resolución del máximo tribunal, el abogado defensor de la víctima de abuso sexual, Jaime Winter, comentó que este fallo «además de hacer justicia para una mujer valiente como Francisca», también servirá para que más mujeres se atrevan a denunciar y «no dejen de hacerlo por temor a represalias de este tipo «.
Este miércoles la Sala Penal de la Corte Suprema acogió el recurso de nulidad presentado por Francisca Díaz, la joven estudiante de derecho que fue condenada en noviembre del 2018, a tres años y un día de presidio con el beneficio de libertad vigilada y el pago de una multa de 1 UTM, por denuncia calumniosa en contra de Willy Fahrenkrog, el ex fiscal subrogante de Hualaihué, a quien acusó de haber abusado sexualmente de ella.
El máximo tribunal absolvió de cargos a Díaz y determinó que no hay motivos para condenar a la joven por haber denunciado al fiscal. Jaime Winter, uno de los abogados que respaldaron a Francisca Díaz en el caso, comentó que este fallo «además de hacer justicia para una mujer valiente», también servirá «para que más mujeres se atrevan a denunciar y no dejen de hacerlo por temor a represalias de este tipo «.
Winter concluyó que el giro que dio este caso puede ser un aporte para que «como sociedad, avancemos un poquito en conseguir una igualdad de derechos entre todas las personas que la conformamos”.
La estudiante de Derecho de la Universidad Austral de Chile, Francisca Díaz, vivió un calvario al ser condenada por el delito de injurias y calumnias contra el ex funcionario del Ministerio Público, Willy Fahrenkrog, a quien denunció por abuso sexual en febrero del 2016.
La causa determinada por el Ministerio Público como «una relación consentida» en vez de abuso sexual, se transformó en una querella por denuncia calumniosa de Fahrenkrog contra Díaz el 16 de junio del 2016, luego de que el Juzgado de Garantía de Puerto Montt decretara el sobreseimiento definitivo de la acusación contra Fahrenkrog, determinando que la denuncia «reunía los caracteres de calumniosa».
En ese contexto judicial, declaraciones como las de la carabinera Carolina Montiel, quien fue la primera en tomar el testimonio de Díaz el día de la denuncia, contribuyeron a que la condena por injurias y calumnias fuera una realidad. En este sentido, durante la primera jornada del juicio, la carabinera había declarado que la joven a pesar de estar llorando, «no estaba tan afectada» y no presentó «un llanto de violación».
Durante el mismo proceso judicial, el abogado de Willy Fahrenkrog, Andrés Firmani, incluso le preguntó a Francisca Díaz si «sabía leer», cuando discutían sobre la definición de la palabra «penetración».
En este escenario de injusticias contra la víctima, la Corte Suprema decidió acoger el recurso de nulidad presentado por Francisca Díaz en diciembre del 2018, y absolvió a la joven un mes más tarde.
En el mundo virtual y de las redes sociales, la consigna #FranYoTeCreo se viralizó gracias a organizaciones feministas como la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres y la Coordinadora 8 de Marzo, quienes criticaron al sistema judicial por la condena de primera instancia en contra de Francisca Díaz.
Adhiriendo al descontento de las manifestaciones feministas, la prodecana de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Austral de Chile, Yanira Zúñiga, comentó que «los estereotipos están presentes en la práctica judicial y en una serie de juicios que afectan a las mujeres».
En el caso de Díaz, la abogada considera que se asumió «el uso de Tinder como disposición de las mujeres a tener de entrada relaciones sexuales; que el alcohol por sí solo es indicador, en la medida que se enmarca en una reunión con un varón que se conoce a través de Tinder, de que es indicio de presentación de consentimiento sexual».
En cuanto a la esfera política, la diputada PC Camila Vallejo comentó a través de Twitter que «no es justo arriesgarte a que publiquen tu vida íntima y sexual con difamación; a penas de cárcel y a no poder titularte».
En acuerdo con la parlamentaria, la diputada PRO Marisela Santibáñez , criticó que «la justicia chilena abandona a la mujer que denuncia y la decisión de los medios es invisibilizar el caso».
Los hechos ocurrieron el 12 de febrero del 2016, cuando Francisca Díaz se juntó con Willy Fahrenkrog, quien en ese entonces era el fiscal subrogante de Hualaihué en la región de Los Lagos.
Ambos se habrían conocido a través de la plataforma Tinder, donde entablaron conversaciones que los llevaron a juntarse después de un tiempo. En la ocasión, Fahrenkrog le comentó a Díaz que iría a Puerto Montt para participar de un asado con sus compañeros de trabajo, y que aprovecharía el viaje para conocerla personalmente.
En los pantallazos, se ve que Francisca Díaz se negó a reunirse con él, porque le daba «la sensación» de que la necesitaba «para hacer hora». Sin embargo, las insistencias del joven fiscal la hicieron cambiar de opinión. Al día siguiente se juntaron y a eso de las 20:00 horas se dirigieron al centro de Puerto Montt para «tomar algo».
Tras beber alcohol en el local Baco Bar, el acusado habría propuesto que fueran por el tercer trago, pero Francisca Díaz se habría negado. Durante la junta, él le habría dicho a Díaz que «merecía estar con un hombre bueno porque era muy esforzada, simpática y bonita», a lo que ella advirtió que «no se pasara rollos» porque no pasaría nada entre ellos.
Luego, Francisca Díaz lo acompañó a buscar un hostal donde pasar la noche, y cuando llegaron al lugar, ella lo acompañó a ver la habitación bajo los efectos del alcohol. En ese momento, él comenzó a besarla e insistir en que tuvieran relaciones sexuales, pero ella se habría negado.
Fue en ese contexto, de acuerdo a la declaración de Francisca Díaz a la Policía de Investigaciones (PDI), cuando él le «bajó el pantalón y la ropa interior» y la agredió sexualmente.
