BRAGA
Crédito: Agencia Uno
De la mano con el avance en materia de derechos de igualdad en nuestro país, desde el año 2018 se ha reflejado un lamentable aumento respecto de la violencia de género, la discriminación homofóbica, lesbofóbica y transfóbica en nuestra nación.
En el contexto del estallido social y tomando en consideración el inicio de un nuevo año, es importante darnos el tiempo y la oportunidad de reflexionar en torno a las cosas que no deben mantenerse este 2020. El 2019 fue un año marcado por la violencia de género y la discriminación homofóbica, lesbofóbica y transfóbica. Durante el año pasado, fueron asesinadas por sus parejas o exparejas 45 mujeres en Chile, tres más que el año 2018. Además, se registraron 107 femicidios frustrados, según cifras del Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género.
En este sentido, la comunidad LGTBQ+ no tuvo ni siquiera un mes de paz en todo 2019. Entre enero y marzo hubo 20 víctimas de agresión, un 53,8% más que a la misma fecha de 2018, según un estudio realizado por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh). La mayoría de ellos se concentraron en zonas costeras, sin embargo, afectaron a diversas regiones de nuestro país.
Alguno de los casos más emblemáticos denunciados por el Movilh a continuación:
Torturas en año nuevo
En Laguna Verde a un joven le apagaron cigarros en sus manos, le pisaron los genitales y golpearon su cabeza con una piedra. El joven relató que a eso de las 20:00 horas hizo dedo camino a las Docas, siendo llevado por dos sujetos en un automóvil blanco. Todo iba bien hasta que el joven comenzó a dialogar por teléfono con su pareja. Ahí los sujetos comenzaron a insultarlo debido a su orientación sexual, y más tarde a efectuar las torturas ya descritas.
En tanto, en Porvenir, David Muñoz quedó con el 22% de su cuerpo quemado, cuando unos sujetos lo encerraron en el baño y lo obligaron a sumergirse en una tina con agua caliente. Permaneciendo en riesgo vital.
Crédito: Agencia Uno
Lesbofobia en Barrio Bellavista
Una joven pareja lésbica, Catalina y Karina, fue golpeada e insultada cuando se dirigían desde un bar hasta su domicilio, ambos ubicados en el Barrio Bellavista. “Dos tipos nos interceptaron por la espalda atacándonos brutalmente, azotaron mi cabeza contra la muralla gritándonos lesbianas asquerosas, maracas culiás y un sin fin de insultos más”, narró Catalina en sus redes sociales.
Añadió que “lanzaron a mi polola al suelo la patearon en el suelo y cuando ella se logró soltar, para defenderme, me llegó un codazo partiéndome la ceja. Al ver tanta sangre y que unas personas venían (los agresores) decidieron arrancar”.
Crédito: Agencia Uno
Ataque neonazi y persecutorio
Una joven transexual de 18 años sufrió un brutal ataque en una plaza de la comuna de Pedro Aguirre Cerda. Los individuos le marcaron una esvástica (símbolo nazi) en un brazo con un cuchillo y le hicieron cortes en la frente.
En otra ocasión, un joven de apellido Lillo (24) fue atacado mientras esperaba un bus en Alameda con San Antonio por usar zapatillas moradas. Cuando el bus llegó, los agresores se subieron para continuar con los insultos y golpes de pie y puños que terminaron rompiendo su nariz.
La intención de los agresores era bajarlo del bus, para acuchillarlo. “Depravado”, “degenerado” y “te gustan los cabros chicos”, fueron algunas de las frases lanzadas por los agresores, hecho que fue grabado por el mismo chofer, mientras otros pasajeros les pedían a gritos que no le pegaran más.
Pérdida ocular y asesinato en San Antonio
Francisca Guzmán (30) fue atacada por un vecino quien la golpeó con cadenas y candados tanto en su rostro como el torso, mientras le gritaba insultos como “maricón”. Los hechos ocurrieron en San Antonio, en la Calle Los Delfines del Cerro El Carmen y resultaron en la lamentable pérdida de uno de los ojos de Francisca.
Otra mujer trans fue asesinada en el Cerro Polanco de San Antonio. La víctima era llamada Brenda y tenía entre 35 y 40 años. La mujer, fue encontrada por transeúntes con gran pérdida de sangre y una herida cortante en el abdomen.
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Botellazo y patada en escalera mecánica
Nelson Araya, en la región del Maule. Fue atacado por un hombre quien le quebró una botella de licor en la cabeza mientras trabajaba. El hombre llevaba hostigando a la víctima desde hace varias horas ese día. “Me preguntó si yo era gay, mi número de teléfono, mi nombre. Le pedí que se retirara porque no estaba para hablar de mi vida privada, sino para atender”, dijo la víctima. Ante el rechazo, el hombre aprovechó un despiste para cometer el ataque.
En otra ocasión, una pareja de jóvenes lesbianas fue atacada por un hombre en el Metro Quinta Normal. Una de las afectadas sostuvo que el sujeto «me empujó en el Metro y luego me insultó a mí y mi pareja, gritándome “cochina nunca vas a tener pico”, “lesbiana culiá te voy a sacar la chucha”. Luego, en la escalera mecánica de salida, otra vez comenzó a gritarme y me lanzó una patada».
Discriminados por la justicia
Una pareja gay, Araya (35) y Gómez (38) fueron agredidos física y verbalmente por su compañero de trabajo John Arias, además de ser discriminados por funcionarios de la Tercera Comisaría de Santiago.
Víctor recibió un cabezazo de frente por parte de John, señalándole “te pego por maricón”. Aturdido y en el suelo, Víctor intentó contener la sangre que salía de su nariz y boca. Ahí escuchó a Arias decirle, “así se trata a los maricones, en el suelo deben estar”.
Un carabinero que conducía la patrulla patente RP 4220 le dijo a José, “cálmate, cálmate si no somos na paramédicos”. Acto seguido se negó a darle la mano, “estás sangrando y quizás que enfermedad tienes””. A ello se sumó que el mismo policía entregó antecedentes erróneos en la constancia de los hechos.
Ataque grupal a mujer trans
En Santiago, en el paradero 25 de Gran Avenida, cuatro sujetos se bajaron de un automóvil y comenzaron a gritarle “caballo” a Isidora Contreras, una mujer trans. Los agresores le pegaron con un palo en la cara hasta que Isidora quedó inconsciente, con daños severos en su nariz, labios y piernas. Al despertar, transeúntes la ayudaron y llevaron a constatar lesiones a un centro médico y a la policía.
Ni cerca de su casa hay tranquilidad
En Viña del Mar, el 14 de septiembre un joven se dirigía a comprar a un negocio cercano a su casa. Al llegar, fue atacado verbalmente por una mujer que estaba en compañía de su hijo y polola. Luego de que el joven los increpara para que terminaran de insultarlo, el hijo de la mujer se abalanzó sobre él y comenzó a brindarle golpes de puño mientras que la mujer lo golpeaba con botellas.
Amenazas en su hogar
Una pareja lesboparental, fue víctima de un ataque a su hogar en la comuna de Maipú. La pareja llevaba viviendo dos años en el domicilio, cuando el día siete de octubre, el portón de su casa amaneció rayado con la frase “aquí viven lesbianas”. La pareja no tiene la menor idea de quiénes podrían ser los responsables de este ataque.
Noviembre
Cuando la justicia funciona
Un joven de 25 años, de iniciales B.E.S.C, sufrió una violenta agresión homofóbica propinada por su propia hermana y su cuñado en la comuna de Lo Espejo. El joven, quien sufre crisis de ansiedad, estaba atravesando por un episodio de ataque de pánico. Ante esto, según denunció la víctima, “mi hermana empezó a decirme “corta tu show maricón”, mi cuñado se abalanzó sobre mí con furia. Me inmovilizó de manos, mientras mi hermana gritaba “pégale al maricón”. Todo esto ocurrió en la pieza de mi madre”.
La golpiza duro 20 minutos en donde lo atacaron en las costillas, cara, brazos y genitales. Incluso lo mordieron y le quebraron la nariz, además de dejarle el rostro desfigurado con los hematomas. “Me gritaban “esto te pasa por maricón y hueco”, dijo el joven. Ellos mismos después llamaron a carabineros, pidiendo que se lo llevaran preso porque era un peligro. Carabineros se rehusó diciéndoles que eran ellos los que debían ir presos por cometer la atroz agresión.
Sin tolerancia hasta en víspera de navidad
En Puerto Montt, mientras esperaba locomoción para volver a su domicilio. Gema Vargas (27), fue abordada por tres sujetos quienes comenzaron a ofenderla, para luego proceder a agredirla con golpes de pies y puño. Vargas quedó con su rostro desfigurado, con pérdidas dentales, fractura de nariz, daño maxilofacial y con riesgo de ver reducida su capacidad visual.
Este ataque ocurrió sólo días antes de que entrara en vigor la Ley de Identidad de Género. El Movilh denunció el hecho y pidió que la justicia usara la agravante otorgada por la Ley Zamudio.
Ante estas situaciones que se vivieron durante el 2019, el vocero del Movilh, Oscar Rementería, conversó con El Mostrador y declaró que, “a medida que avanzan los derechos de igualdad en nuestro país, los sectores contrarios a este tipo de libertades reaccionan de manera mucho más violenta. Durante el año 2018 nosotros pudimos apreciar un aumento de un 44% de las violencias por discriminación y paradójicamente, fue también el año que hubo la mayor cantidad de avances legales para la población trans en nuestro país”.
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Es por ello por lo que el movimiento ha dado continuamente contención y apoyo a las víctimas y a sus familiares, “los orientamos para que puedan presentar las acciones judiciales pertinentes sea a través de denuncia en la policía de carabineros, en la PDI o directamente en la fiscalía”, dijo Remetería.
Para el Movilh, el llamado que hay que hacer a la ciudadanía es “a respetar a todas las personas, todos somos diferentes y los 17 millones de habitantes de Chile podemos ser víctimas de la discriminación, y es por eso nosotros debemos ser los primeros defensores de los derechos de todas las personas”, determinó el vocero.
