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Hace dos meses, la Cámara Alta aprobó un proyecto de acuerdo que emplazaba al Ejecutivo a realizar todas las gestiones para dar “auxilio” al empresario chileno, ante la orden de Notificación Roja emitida por Interpol. Fueron 26 votos a favor y solo la abstención del senador RD. Según el parlamentario, lo hizo como “una señal política de desacuerdo en el fondo con lo que estaba solicitando al Ejecutivo». Ahora que la situación empeoró para el ex fabricante de armas, porque el martes el Departamento de Justicia de EE.UU. despachó a Chile una solicitud de detención con fines de extradición en su contra, el senador opina que “Cardoen tiene que ir y enfrentar la justicia, y ahí demostrar si es inocente”.
En enero de este año, el Senado aprobó un proyecto de acuerdo solicitando al Ejecutivo «realizar las gestiones políticas, diplomáticas y judiciales necesarias para dar auxilio al empresario Carlos Cardoen Cornejo ante Interpol por la mantención ilegal de la Alerta Roja, y plantee ante ese organismo su preocupación por la falta de adecuación de sus prácticas institucionales a los estándares internacionales de derechos humanos».
La iniciativa tuvo su origen en un texto presentado por senadores de todos los colores políticos, desde Chile Vamos a la ex Nueva Mayoría. De hecho, en una información publicada en su página web, la Cámara Alta califica a Cardoen como un «destacado empresario que ha contribuido significativamente al desarrollo cultural y turístico de nuestro país», obviando el dato de que alcanzó su fortuna vendiendo bombas de racimo en la época de los conflictos en Medio Oriente en los años 80.
Como era de esperar, el proyecto fue aprobado casi por unanimidad, con 26 votos a favor y solo una abstención, la del senador de Revolución Democrática (RD), Juan Ignacio Latorre.
«Quería dar una señal política de desacuerdo en el fondo con lo que estaba solicitando al Ejecutivo», explica a El Mostrador el parlamentario frenteamplista.
A juicio del senador, existe una red política de respaldo hacia el poderoso empresario y ex amigo personal del Presidente Sebastián Piñera, lo que explicaría el amplio apoyo que recibió el proyecto de acuerdo en enero, a pesar de las graves acusaciones que pesan contra el ex fabricante de armas.
«Lo que uno percibe es que el señor Cardoen ha cultivado una red transversal de apoyo político de todos los sectores”, plantea, pero precisa al mismo tiempo que «nuestra labor es legislativa, es legislar sobre el bien común y no con los intereses particulares de los empresarios».
Pero hoy el panorama para Cardoen es mucho más complejo que hace dos meses. El martes, el Departamento de Justicia de Estados Unidos despachó a Chile una solicitud de detención con fines de extradición en contra de él.
Según Latorre, se trata de «acusaciones muy graves por parte de Estados Unidos con todo el tema de la venta de armas, bombas de racimo que se utilizaron en la guerra del Medio Oriente. Hay un requerimiento, y las acusaciones son suficientemente graves como para que él enfrente la justicia».
Respecto a la solicitud de detención y extradición emitida desde Washington contra Cardoen, el parlamentario lo calificó como algo «relevante e importante, es una oportunidad para que él enfrente la justicia», recalcó.
«Entiendo que él mismo está disponible, por lo que le escuché en algunas declaraciones, a enfrentar la justicia. Me parece que es una oportunidad que él tiene para demostrar en tribunales de justicia si es inocente o no. Y si es inocente, se libera de los problemas que tiene de circulación de libre tránsito», añadió el parlamentario.
Desde 1993, la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) mantiene una orden de Notificación Roja en contra de Cardoen, a raíz de una solicitud del Gobierno de Estados Unidos. Esta ha sido reiterada por dicho Estado en 2009, y renovada por Interpol, inicialmente hasta 2015 y, posteriormente, hasta el año 2019.
