NUEVA CONSTITUCIÓN
Crédito: ATON
Temas como el régimen político, la plurinacionalidad, forma de Estado y el modelo económico, forman parte de estos 21 nudos que el Observatorio Nueva Constitución logró identificar. Además establecieron una serie de desafíos y urgencias a tener en cuenta. Uno de ellos es la «urgente necesidad de definir el proceso participativo mediante el cual la ciudadanía podrá incidir en el debate de los contenidos constitucionales. Dos reglamentos, el de participación popular y el de participación indígena, incorporaron una multiplicidad de posibilidades de participación y la consulta indígena».
El Observatorio Nueva Constitución realizó un análisis sobre los 21 nudos críticos de la discusión constituyente, entre los que destacan el régimen político, la plurinacionalidad, la forma de Estado y el modelo económico, entre otros.
En un documento, el Observatorio señaló que «el análisis de esta semana es un reporte especial y se extiende a los 21 nudos críticos que, como Observatorio, estimamos tendrá la discusión constitucional considerando la presentación próxima de normas constitucionales. El Análisis se sostiene en el seguimiento de los actores y temas que han abarcado la discusión hasta hoy. Hemos dispuesto 3 nudos críticos por Comisión para poder tener una panorámica adecuada de toda la discusión».
En el caso de la Comisión de Sistema Político, el primer nudo que se detectó tiene que ver con la discusión sobre régimen político: «Considerando las audiencias y posiciones de convencionales, hay acuerdo que el híper presidencialismo debe revisarse. El punto crítico aquí es si reformular el presidencialismo (mayor equilibrio entre ejecutivo-legislativo) o pensar una fórmula tipo semi-presidencial. El parlamentarismo es una posición minoritaria. Dentro de este tema, un punto clave es la definición sobre el Congreso: si será unicameral o bicameral, y en este segundo caso, que rol y justificación tendría una segunda cámara».
En la Comisión de Principios Constitucionales, uno de los temas que genera mayor debate es la definición del modelo político del Estado: «Hay una voluntad inicial de pasar desde el Estado subsidiario a un Estado social, sin perjuicio de la tensión desde los sectores conservadores de conciliar la idea de subsidariedad con el nuevo modelo constitucional. Gran parte de la discusión hasta ahora ha estado ligada a los derechos y reivindicaciones, en especial derechos sociales, cuestión que tiene una expresión central en el apartado de principios, donde la cláusula social se instituye como un modelo posible para cambiar la lógica del sistema constitucional actual y avanzar hacia uno de lógica redistributiva y solidaria», dice el análisis.
En lo que respecta a formas de Estado, el documento del Observatorio Nueva Constitución sostiene que «se expresan dos posiciones o intereses iniciales. El primero dice relación con un Estado Unitario plurinacional y otro del tipo Estado regionalizado-descentralizado. Acá se mencionan la existencia de comunidades indígenas con sus propias reglas de justicia, diferencias entre derechos para no nativos y nativos, y la existencia de un criterio de igualdad para todos, sin distinción».
Con relación al modelo económico, «por un lado, se da a entender la necesidad de continuar con el mismo modelo, mientras que otra corriente apunta más a un Estado social de mercado».
Uno de los temas que despierta más interés dentro del proceso constituyente, es el de los derechos sociales. Al respecto, el Observatorio sostiene que «lo central de esta discusión es la nueva lógica e impronta que el constituyente le confiera a estos derechos, donde el Estado tenga un rol preferente y preeminente en la prestación de los mismos».
Otro de los nudos identificados tiene que ver con la creación de una Constitución ecológica. Señalan que «la mayoría de los miembros de la Comisión tienen una posición más radical que el resto de los convencionales (la mayor parte de los convencionales miembros se declaran eco-constituyentes y son activistas de diversas organizaciones medioambientales con presencia nacional). Seguramente las propuestas de norma de la Comisión serán normas favorables a las materias medioambientales, territorios, fin a la extracción de recursos naturales y relaciones con comunidades».
En lo que tiene que ver con un nuevo modelo de desarrollo, «la posición mayoritaria de los miembros de la comisión se orienta a una modificación sustantiva del modelo de desarrollo en el país. Los sectores moderados de la Comisión han buscado relevar la importancia de la matriz productiva del país en base a extracción de recursos naturales, inversión extranjera y generación de empleos. La complejidad de abordar estas materias en conjunto con medidas medioambientales ha provocado un desplazamiento de los asuntos económicos en la Comisión».
En lo referente al sistema de justicia, hay debate respecto a la reforma o cambio de algunas instituciones como el Tribunal Constitucional, la Controlaría o el Ministerio Público: «Los órganos constitucional actuales han planteado la reforma de aquellos aspectos que hoy con objeto de críticas. Resta por observar si esa será la visión de los y las convencionales, lo cuáles se han mostrado bastante críticos a estas instituciones».
El grado de autonomía de los órganos del Estado es otro de los puntos que genera discusión: «Una cuestión nuclear es la discusión sobre el grado de autodeterminación de los órganos constitucionales, cuestión que además se liga a lo que se resuelva en otras comisiones como la de Forma de Estado».
Finalmente, el Observatorio Nueva Constitución estableció una serie de desafíos y urgencias a tener en cuenta. Uno de ellos es la «urgente necesidad de definir el proceso participativo mediante el cual la ciudadanía podrá incidir en el debate de los contenidos constitucionales. Dos reglamentos, el de participación popular y el de participación indígena, incorporaron una multiplicidad de posibilidades de participación y la consulta indígena».
«Sin embargo -agregan- la tardanza en la configuración de la Secretaría Técnica de Participación, de la implementación de la plataforma digital, en un contexto temporal acotado, requiere con urgencia de definiciones sobre una metodología de participación incidente clara».
