Abbott intenta golpe de autoridad y remueve a fiscal Arias de caso Corpesca

Un vuelco ha tomado el denominado caso Corpesca, luego de que el Fiscal Nacional, Jorge Abbott, definiera remover a quien estaba a cargo de dicha investigación, el fiscal Emiliano Arias.

Por medio de un comunicado, la Fiscalía Nacional informó que en virtud del artículo 19 de la Ley Orgánica Constitucional del Ministerio Público, Abbott «decidió reasignar la causa denominada «CORPESCA» al Fiscal Regional del Biobío, Julio Contardo, y dejar sin efecto la designación del Fiscal Regional de O’Higgins, Emiliano Arias».

La razón se centraría en «las opiniones vertidas por Arias en una entrevista concedida al diario La Tercera, en la que habría infringido el deber de reserva que le impone el artículo 64 de la Ley Orgánica Constitucional del Ministerio Público entregando, a través de dicho medio de comunicación, antecedentes del caso que se encuentra actualmente vigente y actuando con escasa prudencia al hacer aseveraciones que exceden el ejercicio de su función como fiscal, refiriendo cuestionamientos políticos al trabajo legislativo que nada se relacionan con la función que constitucionalmente se le ha asignado».

Además, agrega que sobre la base de la nueva Ley N 20.931, conocida como «Agenda Corta», el Fiscal Nacional «resolvió instruir una investigación administrativa en contra del Fiscal Regional Arias, la que será substanciada por el Fiscal Regional Metropolitano Centro Norte, Andrés Montes».

Cebe recordar que el fiscal Arias señaló, en una entrevista dada a La Tercera, que en la génesis de la Ley de Pesca “hubo corrupción (…) es una ley en cuya formación se cometieron delitos. Eso está con un nivel de acreditación altísimo dado por la prisión preventiva. En consecuencia, en el proceso de formación de la ley hay corrupción”.

También señaló que en el «caso Corpesca, donde estarían acreditados incentivos pecuniarios a algunos parlamentarios como al senador Jaime Orpis, también se requiere investigar el alcance que tuvieron los pagos recibidos por el diputado Iván Fuentes de parte de pesqueras de Coyhaique, algunos de los cuales fueron gestionados por el senador DC, Patricio Walker».

Abbott en tensión

El golpe del Fiscal Nacional se deja caer tras una serie de momentos críticos al interior del Ministerio Público. Por un lado, marcado por las tensiones entre Emiliano Arias y el fiscal de Valparaíso, Pablo Gómez, esto por la fecha en la que el Ministerio Público tomó conocimiento  de los correos, que dejaron en evidencia la relación entre el ex senador Pablo Longueira y el ex gerente general de Soquimich, Patricio Contesse, en el marco del caso SQM.

Según Arias, los antecedentes estaban en conocimiento de la Fiscalía desde 2015 y Gómez, por su parte, asegura que los recibió solo el 8 de enero. 

Es en medio de esta pugna que el Fiscal Nacional interviene. Luego de que Arias diera una entrevista a CNN Chile, Abbott enfatizó en que «en particular le he señalado (al fiscal Arias) que sus comentarios han producido efectos que lamento, por las dudas que pueda sembrar por la actuación de otros».

Otro de los momentos de tensión se dio tras una entrevista dada por Jorge Abbott a La Tercera, en la cual intentó conferirle una proyección al marco en el que se moverán las investigaciones lideradas por la Fiscalía.  “Solo espero que no duren siete años. Al contrario, queremos buscar la fórmula para acotar esas investigaciones y darles un pronto término”, sentenció Abbott el domingo 27 de marzo en el cuerpo de Reportajes del mencionado diario.

Dicha búsqueda por lograr darles un cierre a las causas denominadas como de «platas políticas» respondería a su delicado estado de salud –tras sufrir un infarto agudo al miocardio, a un mes de haber asumido–. Con este objetivo, comenzó a delegar el trabajo en los fiscales regionales, de forma que el caso Corpesca había quedado en manos del fiscal Arias.

En marzo de este año , fuentes del Ministerio Público, señalaron a El Mostrador que, a diferencia de Arias, el fiscal Pablo Gómez, está en «plena sintonía con el abogado, quien coincide con su convicción jurídica de cerrar todos los casos, no dilatarlos y por eso es que Abbott lo respalda».

Otro desencuentro de Abbott se dio con el Fiscal de la Zona Oriente, Manuel Guerra, quien en junio de este año, al ser consultado en CNN Chile por si la apertura de la investigación por cohecho, negociación incompatible y posibles delitos tributarios en contra del ex ministro Jorge Insunza (PPD) responde a las presiones de Chile Vamos, aseguró que fue su decisión el abrir dicha indagatoria.

«Había una información de antigua data de que el ex ministro Insunza había realizado asesorías a mineras mientras era parlamentario», declaró entonces el fiscal Guerra y agregó que, tras tener «noción de conocer el domicilio de estas empresas» y, además, avanzar en otras investigaciones, se pudo abrir esta nueva arista en las indagatorias por platas políticas, que será llevada adelante por los fiscales Carlos Gajardo y Juan Pablo Norambuena.

Tras esta entrevista, el Fiscal Nacional aseguró que fue él mismo quien instruyó la apertura de la indagatoria, «el reclamo que había y las críticas que existían respecto de esa situación fue lo que me llevó a preguntar dónde se estaba llevando a cabo esa investigación. Como no había ninguna, pues bien, se abrió la investigación respectiva», declaró en su momento. A lo que el fiscal Guerra respondió que no había sido Abbott sino él quien había abierto la indagatoria.

Es en este contexto que se da una nueva jugada del Fiscal Nacional, quien una vez más intenta dar un golpe de timón y demarcar los límites al interior del Ministerio Público y lograr instaurar la «doctrina Abbott» entre los persecutores.