BRAGA
Entre las escritoras estudiadas se encuentran nombres como Mercedes Marín, Carmen Arriagada, Rosario Orrego, Lucrecia Undurraga, Maipina de la Barra, Martina Barros, Amelia Solar, Inés Echeverría Bello, Delia Rojas y Gabriela Mistral.
El proyecto, titulado “Intercambios y tráficos: Estrategias colaborativas para la auto y co-formación en trayectorias intelectuales femeninas en el campo cultural chileno (1850-1940)”, busca analizar cómo las mujeres se formaron como escritoras en un contexto donde las oportunidades educativas estaban limitadas por las normas de género.
En el marco de los proyectos Fondecyt de iniciación 2024, la académica Damaris Landeros, del Instituto de Literatura y Ciencias del Lenguaje (ILCL) de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), lidera una investigación sobre la trayectoria de escritoras chilenas durante los siglos XIX y principios del XX.
La investigación se enfoca en dos dimensiones principales: la escritura y la formación de mujeres durante el período mencionado. “En otras palabras, analizaremos el contexto donde las mujeres se educaban, principalmente para ser madres y esposas, cómo ellas lograron establecer herramientas para transformarse en escritoras y agentes dentro del campo literario en formación en un tiempo en el que ni siquiera podían optar a plenos derechos políticos”, reflexionó la académica.
Entre las escritoras estudiadas se encuentran nombres como Mercedes Marín, Carmen Arriagada, Rosario Orrego, Lucrecia Undurraga, Maipina de la Barra, Martina Barros, Amelia Solar, Inés Echeverría Bello, Delia Rojas y Gabriela Mistral, quienes compartieron el desafío de desarrollar su producción intelectual en un período marcado por la construcción del Estado-Nación y la conformación inicial del campo cultural y literario chileno.
Una segunda línea de investigación se centra en la búsqueda de estrategias de formación, que incluye el estudio de cartas, diarios, revistas y reuniones como medios de intercambio intelectual entre las escritoras y su entorno educativo y cultural.
Landeros expresa su entusiasmo por este proyecto, destacando la colaboración con otros investigadores e investigadoras, que permitirá relevar y dar sentido a las lógicas de legitimización y autorización de estas escritoras, contribuyendo así a la comprensión del campo literario chileno durante el siglo XIX y principios del XX.
Esta investigación promete arrojar luces sobre un aspecto poco explorado de la historia literaria chilena, resaltando la importancia de las estrategias de formación y el papel de las mujeres como agentes de cambio en el campo cultural y literario de la época.
