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Crédito: Agencia UNO
El blindaje del ministro de Justicia al exsenador imputado por corrupción en el Caso Corpesca configura un claro caso de conflicto de intereses, acusan varios actores del mundo público y político. En La Moneda aseguran que las opiniones de Larraín son “personales”, pero el secretario de Estado pidió que se le tome la declaración en dependencias de su cartera, lo que abrió otro flanco de cuestionamientos [ACTUALIZADA]
Las declaraciones del ministro de Justicia, Hernán Larraín, a favor de un imputado por corrupción siguen agitando el debate. El apoyo del secretario de Estado a favor de Jaime Orpis, imputado en el caso Corpesca por fraude al fisco, cohecho y delitos tributarios, por el cual arriesga una pena de 21 años de cárcel, configura un claro conflicto de intereses, acusan varios actores del mundo público y político.
Así lo hizo ver el diputado de Revolución Democrática (RD), Pablo Vidal. “¡Esto es una vergüenza, es inaceptable! Al declarar en favor de Orpis, en su calidad de ministro de Justicia, tiene un evidente conflicto de interés en su rol público”, dijo el parlamentario en Twitter.
Larraín será una de las más de 300 personas que entregarán su testimonio en el juicio oral que se inició este lunes 25 en el Tercer Tribunal Oral en lo Penal de Santiago, pero encendió la polémica por sus dichos a favor de Orpis, al señalar que «tengo plena confianza en su conducta». Sin embargo ante el revuelo provocado, luego trató de matizar, argumentando que sus dichos son de carácter personal. También sostuvo que fue citado por un juez, por lo que está “obligado” a declarar y “no es que yo quiera hacerlo”.
Sin embargo, hizo una petición –que se basa en la prerrogativa que poseen las autoridades para fijar el lugar donde atestiguar- para que su declaración sea tomada en dependencias de su cartera.
Esto abrió otro flanco de cuestionamientos. “Ayer el Ministro @andreschadwickp decía que @HernanLarrainF declaraba en el Caso Orpis y que era «una expresión de carácter personal». Hoy se informa que la declaración «personal» del Ministro se llevará a cabo en el mismísimo Ministerio de Justicia. ¡Somos tontos hasta las doce!”, criticó el exfiscal Carlos Gajardo.
El senador DC, Francisco Huenchumilla, también arremetió contra Larraín, señalando que el ministro “no es una persona privada, él está a cargo de una importante repartición en el Estado como es el Ministerio de Justicia (…) Por lo tanto, no tiene la libertad que pudiera tener siendo una persona privada. Esa es la responsabilidad ética y política que tiene el ministro de Justicia».
El parlamentario DC añadió que Larraín «tiene que responder a las responsabilidades que tiene en el Estado, las tareas de relacionarse con el Poder Judicial y en el nombramiento de los jueces».
Sin embargo, al salir en defensa de Larraín, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, descartó que las declaraciones de su colega puedan influir en el caso. “Eso sería pensar que los tribunales de justicia no actuaran con la suficiente independencia y sabiduría en el ejercicio de la ley”, dijo. En ese sentido, enfatizó que “no tiene ninguna incidencia ni ninguna relación con ningún aspecto de carácter judicial».
