PAÍS
Tras el triunfo del “En contra” en el plebiscito constitucional, el Mandatario hizo un llamado al diálogo, dejando claro que la prioridad es resolver las urgencias del país por sobre la Carta Magna. Enfatizó la necesidad de acuerdos en temas como pacto fiscal, salud, pensiones, educación y vivienda.
“Durante nuestro mandato, se cierra el proceso constitucional; las urgencias son otras”. Así comenzó el discurso del Presidente Gabriel Boric después del contundente resultado del plebiscito constitucional de 2023, en el que la opción “En contra” se posicionó por encima de la opción “A favor” con una diferencia de más de 10 puntos.
Según la última actualización del Servel, con el 99.65% de las mesas escrutadas (correspondiente a 39,588 mesas de un total de 39,728), el conteo de votos arrojó un 44.24% para la opción que aprobaba el texto apoyado por la derecha y un 55.76% para quienes lo rechazaban.
“No me cabe ninguna duda de que lo que demanda la ciudadanía es una mayor capacidad de diálogo, pero sobre todo de acción, abandonar las trincheras y encontrar soluciones a los problemas más apremiantes que enfrentan los chilenos y chilenas”, sentenció el Mandatario desde La Moneda.
En ese sentido, el Presidente Boric –quien si bien no transparentó su opción de cara al referéndum, los partidos de la coalición oficialista se cuadraron en bloque por la opción “En contra”– manifestó que “el proceso constituyente estaba destinado a traer esperanza”. Sin embargo, añadió, “finalmente ha generado frustración” en la ciudadanía.
“El resultado de este plebiscito más que una celebración es un fuerte llamado de atención”, recalcó el Jefe de Estado, junto con poner énfasis en los acuerdos pendientes en política. Específicamente, se refirió al pacto fiscal, a las reformas a la salud y las pensiones, así como a las prioridades en educación y vivienda.
“Como Gobierno, hemos estado abiertos a ceder en varios aspectos de nuestra propuesta original con el ánimo de llegar a acuerdos y avanzar”, declaró el Presidente Boric, que votó cerca de las 11:30 horas en el Liceo Industrial Armando Quezada Acharán de Punta Arenas.
A su juicio, “el país se polarizó, se dividió, y al margen de este contundente resultado, el proceso constitucional no logró canalizar las esperanzas de tener una nueva Constitución redactada para todos”.
“La política ha quedado en deuda con el pueblo de Chile. Y esta deuda se paga logrando las soluciones que los chilenos y chilenas necesitan y nos exigen que alcancemos”, reiteró.
Y concluyó: “El cierre del proceso constitucional debería generar un mejor clima para este entendimiento”.
Al cerrar y pensando en el futuro de su Gobierno, Gabriel Boric aclaró que no hay “ni celebración ni arrogancia. Pelota al piso, humildad y trabajo, mucho trabajo”.
